El ‘no verano’ hunde la asistencia a las playas de Bizkaia a mínimos históricos

con 41 días de sol y 19 de lluvia

Dos personas se abrigan en la playa de Ereaga el 26 de julio, una jornada en la que hubo mal tiempo. (Pablo Viñas)

Los 2,4 millones de personas que acudieron a los arenales es la cifra más baja de la década, con 41 días de sol y 19 de lluvia

DEIA Aitziber Atxutegi - Miércoles, 4 de Octubre de 2017 -

Bilbao - A nadie se le escapa que el pasado verano, por llamarlo de alguna forma, no se caracterizó precisamente por el buen tiempo. Solo lució el sol uno de cada tres días y ello tuvo también su reflejo en la afluencia a las playas: los 2,4 millones de asistencia marcan un mínimo histórico, casi 700.000 personas menos que el año pasado, cuando se rebasaron los tres millones, un año con más días de sol y menos de lluvia. “Ha habido menos días soleados y muchos más días lluviosos que el año pasado”, explicó ayer la diputada de Sostenibilidad y Medio Natural, Elena Unzueta, en el balance de la temporada de playas que terminó el pasado sábado.

Los datos de afluencia son los más bajos de toda la década, muy lejos, por ejemplo, de los 5,6 millones que se contabilizaron en 2012, con 47 días de sol frente a los 41 de este año. De hecho, las jornadas con un tiempo espléndido oscilan todos los veranos entre los cuarenta y los cincuenta días, por lo que este año entra en la media. Lo que se han disparado son los días de lluvia: 19, cuando la media se sitúa en quince y años, como 2015 y 2016, en los que apenas hubo que sacar el paraguas media docena de días.

Así que sí, la climatología explica en parte el descenso de asistentes, pero también la recuperación económica puede tener su peso. De hecho, durante los peores años de la crisis, entre 2009 y 2013, la afluencia a los arenales superó los cuatro millones, ya que muchos vizcainos se vieron obligados a veranear en casa. En 2013, otro verano para olvidar, en el que solo lució el sol 18 de los 122 días comprendidos entre junio y septiembre, se registraron 4,7 millones de asistentes.

Por meses, agosto sigue siendo el mes preferido por los vizcainos para ir a la playa (más de un millón de usuarios), mientras que septiembre fue el que más visitantes perdió en relación al año anterior, que fue muy bueno en asistencia, arrastrado por el mal tiempo.

Las playas preferidas volvieron a ser las cuatro que se sitúan año tras año en el top de los arenales más visitados: La Arena, Ereaga, Arrietara-Atxabiribil y Laga. Gorliz entra también este año en el ranking, desbancando a Bakio.

¿Por qué? Principalmente, porque son las playas más cercanas a los grandes núcleos de población. Y es que la cercanía es el criterio principal para elegir un arenal u otro; solo uno de cada diez usuarios elige el que más le gusta. De hecho, curiosamente, La Arena y Ereaga, pese a ser las más visitadas, son dos de las playas que reciben una nota más baja en las encuestas de satisfacción realizadas entre los usuarios.

Pasó a la historia aquello de pasarse todo el día en la playa. La media de estancia se sitúa actualmente en cuatro horas y media y quizá por ello se eligen arenales a los que llegar rápidamente. Eso sí, la mayoría lo hace a diario o, como mínimo, dos o tres veces a la semana.

Pese a esa cercanía, el medio de transporte más habitual para desplazarse a la playa sigue siendo el coche: lo utilizan la mayoría de los asistentes, seis de cada diez, sobre todo los que acuden a Laga, Laida y La Arena. Solo un 20% lo hace andando, siendo mayoritarios en Aritzatxu, Arrigorri e Isuntza, enclavadas todas ellas en los núcleos de población.

Lo mejor, la seguridad 

Los usuarios de las playas están más que satisfechos con los servicios que en ellas se ofrecen y su grado de conservación. De hecho, en las encuestas que cada año realiza la Diputación entre los asistentes, los arenales reciben una puntuación de 7,85 sobre 10. “Las playas de Bizkaia siguen manteniendo unos estándares de calidad muy altos. Esta valoración tan positiva por parte de los usuarios es un motivo de satisfacción y una excelente recompensa al esfuerzo y al trabajo que realiza el equipo de esta Diputación para que todo funcione correctamente a lo largo de la temporada de playas. Estamos muy contentos”, destacó Elena Unzueta.

Las playas mejor valoradas son las de Gorliz (9,18), Plentzia (8,87) y Karraspio (8,59) y, aunque ninguno de los arenales baja del 6,65, La Arena, Ereaga y Arrigunaga son las que reciben puntuaciones más bajas.

La seguridad es el aspecto mejor valorado por las personas que acuden a las playas, sobre todo el servicio de socorristas, la tranquilidad a la hora de darse un baño y la eficacia de los hondartzainas.

Los usuarios de los arenales también destacan positivamente su limpieza, como la disponibilidad de papeleras y contenedores, o su conservación. Además, servicios como la megafonía, la facilidad de acceso o la limpieza de los baños y servicios son muy bien valorados por las personas que acuden a las playas. Uno de los servicios estrella son las pulseras para niños, que permiten escribir sus datos de contacto para evitar que se pierdan: uno de cada tres usuarios no duda en otorgarle una puntuación de diez y otro 21%, un nueve.