Los tribunales niegan a Kutxabank la posibilidad de recuperar sus inversiones especulativas en Murcia


La sentencia establece «sin duda alguna» la «prevalencia» medioambiental sobre el interés urbanístico.

23 julio, 2014


Si Kutxabank tenía alguna esperanza de poder recuperar las inversiones especulativas e investigadas por la justicia que el entonces presidente de Kutxa, Fernando Spagnolo, apoyó en la costa mediterránea estas se van desvaneciendo. El Tribunal Superior de Justicia de Murcia acaba de desestimar el recurso de la inmobiliaria de Kutxa, Inverlur, contra el decreto de la Comunidad Autónoma que aprobaba el plan de gestión de la Zona de Especial Protección para Aves (ZEPA) de la Almenara, Moreras y Cabo Cope. Este decreto, aprobado en 2010, anulaba la modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Águilas, por lo que la finca La Zerrichera volvía a ser no urbanizable, con lo que se frustraba definitivamente la construcción de un resort con 4.000 viviendas, hotel y campo de golf.


Kutxa invirtió en 2006 128 millones de euros para comprar una finca rural de 240 hectáreas poco después de que el consejero de Obras Públicas y Vivienda de Murcia, Joaquín Bascuñana, recalificara esos suelos protegidos por la legislación europea. Bascuñana está procesado en el caso Novo Cartago, otra operación fallida de Kutxa en Murcia en la que invirtió 100 millones de euros y de la que salió en 2006 endilgándole el terreno a la CAM Caja de Ahorros del Mediterráneo.

Los terrenos de Novo Cartago están colindando con los de Lo Poyo. Lo Poyo, otro polémico proyecto con protección medioambiental que ya fue anulado por el TSJ de Murcia en el año 2000, fue comprado por la Kutxa y Yeregui, con intermediación de Juan Antonio Roca por 214 millones de euros en 2004 a la familia Armengol, un año antes de que el Ayuntamiento de Cartagena reiniciara los trámites para recalificar la finca.

La sentencia del TSJ de Murcia, dictada el día 4 de este mes, establece «sin duda alguna» la «prevalencia» medioambiental sobre el interés urbanístico. La sentencia no tendrá influencia en la cuenta de resultados de Kutxabank, ya que Kutxa antes de la fusión ya provisionó todas las operaciones fallidas en la costa mediterránea, la mayor par de ellas bajo investigación judicial.

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